lunes, 18 de abril de 2016

La gran apuesta (parte II)

Es muy interesante el debate que se ha abierto en el blog de CAZADIVIDENDOS con el artículo de Álvaro "La bomba nucular". Y a mí me han parecido muy interesantes los comentarios que centraban la cuestión sobre si gestión activa o, mejor, gestión pasiva. Aquí hay material para todos los gustos y yo, desde luego, no me atrevo a romper una lanza ni por un lado ni por el otro, ya que utilizo la gestión activa y la pasiva de mis inversiones según me place y lo veo oportuno, sin rigideces ni dogmatismos.

Desde luego, el hablar de los derivados que Álvaro tocaba de manera circunstancial no me parece que fuera la centralidad del debate. Además, desde mi punto de vista, apenas hay debate. Es como si nos ponemos a hablar aquí si merece la pena comprar BME a 30. Pues depende, como diría un buen gallego. El que quiera los usa y el que quiera no. Luego ya cada uno hace sus cuentas, como si compra BME a 30. Ya somos mayorcitos...Y si hay algún niño/niña leyendo este blog, que deje de leerlo inmediatamente, que viene el Coco...

Pues los derivados son el instrumento financiero que usaron nuestros protagonistas de "La gran apuesta" para hacerse ricos. Y lo consiguieron. Ricos en un plis-plas. Sufriendo un montón, sobre todo en la fase final, arriesgándolo todo, pero lo consiguieron. 

La verdad es que no me dan envidia (bueno, un poco sí). Apostaron, sin lugar a dudas. Casi todos fiándose de su interpretación de los datos, que recopilaron extensamente, incluso en el terreno. Uno piensa que esa forma de proceder tan exhaustiva les ha debido permitir ir de éxito en éxito en la vida. Sobre todo después de haberse forrado con los CDSs sobre los bonos hipotecarios. PUES LA VERDAD ES QUE NO.  Si uno mira sus biografías, varios fracasaron en la gestión posterior de su propio fondo de inversión, tuvieron que dejarlo y volvieron a ser simples asalariados de otras empresas de inversión. Alguno, incluso, en plan iluminado, se ha dedicado a invertir en bienes tangibles como el agua. Más que en comprar metros cúbicos de agua, invierte en alimentos, que es como agua procesada. Está bien, pero no le va espectacular. Quizá sea un poco la ley del pendulo, después de haber invertido en productos complejos e intangibles, inviertes en productos sencillos y tangibles. Pero vamos, no ha triunfado. Entre otros cosas porque la inversión en alimentos es tan antigua como la humanidad (desde muy temprano están datados los primeros silos para almacenamiento de grano). El jugar con la abundancia-carestía de grano, almacenándolo cuando esta barato para venderlo cuando está caro creo que ya lo inventó un tal MATUSALÉN.

Lo que quiero que reflexionemos en esta entrada, y lo de "La gran apuesta" no es más que la excusa para hacerlo, es cómo el tratar nuestras inversiones como "apuestas" nos puede salir mal o nos puede salir bien. El plantearse la compra de un activo como una apuesta, con un elevado nivel de riesgo, no casa mucho con intentar buscar la seguridad de la tan manida INDEPENDENCIA FINANCIERA. Si vamos así por la vida, por lo menos hay que hacer muchisisimas apuestas para que, al menos, alguna nos salga. Yo, desde luego, no apuesto. Creo que no he comprado nunca un fondo, una acción, un bono, un piso o hecho un depósito, que sea una apuesta. He comprado SIEMPRE activos con un bajo nivel de riesgo, apuestas seguras si lo queréis ver así. A CONTRARIAN, cuando muchos intereses mediáticos, especuladores y novatos en bolsa lo desaconsejaban. Pero otros, quizá más expertos o prudentes, no decían nada pero compraban. Claro, eso no sale en las noticias. No es noticia invertir a contrarian, ni está de moda, ni es guay, ni demuestras tus amplios conocimientos haciéndolo. No hay aplausos, de nadie, y menos desde los blogs de bolsa. Veréis en algunos de ellos que lo guay es el pelotazo, el acudir a OPVs exitosas, a ampliaciones donde ganas seguro, a fusiones y adquisiciones donde te puedes sacar rápido un buen dinerito.

Sinceramente, desconfío de cualquier producto de inversión donde la ganancia no esté basada en un factor fundamental, el tiempo. LO QUE NO SE CONSIGUE CON TIEMPO, PACIENCIA Y ESFUERZO NO ME INTERESA. Así de simple. Y, por supuesto, que cada uno haga lo que quiera. No hay ni malos ni buenos, sólo operativas y modos de invertir diferentes. 

Aquí lo dejamos, para que cada uno lo piense y saque sus propias conclusiones. 

Un abrazo

Julio


9 comentarios:

  1. Hola. cierto es que tuve la tentación de ir a unas cuantas, en iberia hubiera doblado pero el resultado es catastrófico, incluso iva al 50% con Lleida.net. que por suerte la retrasaron varias veces la analice bien ( a mi modo) y la descarte.
    No voy a ninguna, prefiero ver como evolucionan y no por esa en especial, si no por que aprendo, el trabajo bien hecho tiene recompensa.

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    1. Hola Antonio. La prudencia dicta esperar, ya que para una OPV que sale bien hay tres que salen mal. Me alegro de que al final, por H o por B, te lo pensaras y no perdieras.
      Si una OPV bien, siempre hay tiempo de ver cómo evoluciona y unirse más tarde, ya que si la queremos por divis lo importante no es el principio, si no los años siguientes. Ahora bien, si hacemos trading, entonces hay que jugársela al principio y apostar. Pero pensemos que siempre hay gente que lo hace con cartas marcadas (tiene soplos de gente de la propia empresa o de dentro de la CNMV. No hablo de oídas, conozco algún caso...)
      Un abrazo
      Julio

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  2. Cierto, supongo, por eso no voy e intento ir a empresas Por fundamentales demostrados.

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  3. Pensar que con derivados se apuesta y que en tu forma de invertir no hay apuesta, creo, es un error. Por supuesto que hay apuesta, y además diría que es una apuesta peligrosa porque ignoras el riesgo en que incurres. Lo apuestas todo al Tiempo, a la idea que a largo plazo la bolsa irá por lo menos manteniéndose, y que las empresas continuarán pagando sus dividendos o incluso los incrementarán. Pero nada impide que dentro de 10 o 20 años, cuando realmente necesites el resultado de esa inversión, tus acciones valgan la mitad de lo que ahora valen, y que los dividendos sean el chocolate del loro. La paciencia y el esfuerzo (?) no son garantía de nada.

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    1. Hola Anónimo. Tienes razón cuando hablas de que UNA bolsa puede cascar y no dar las rentabilidades esperadas en el tiempo. Pero excepto dos o tres casos, en toda la historia, las demás bolsas mundiales se han revalorizado con el tiempo, y mucho, por encima de la inflación. Te recomiendo consultar en Internet (está en varios sitios) lo que se han revalorizado los distintos índices bursátiles en los últimos 30 años.
      Yo no diversificó solo con 10 o 20 acciones de cuatro o cinco mercados. Tengo fondos que cubren más de una treintena. Como puedes ver, a tenor de los datos disponibles, y contando con el tiempo, mucho tiempo, el riesgo es bajo.
      Respecto a la paciencia y el esfuerzo, es cierto que hay casos singulares en los que no se reconocen, sobre todo en esta sociedad que busca lo contrario, enriquecerse rápido y sin esfuerzo. Pero, en mi opinión personal (en este caso no tengo más datos que mi propia experiencia y de la gente que conozco) el esfuerzo y la paciencia en la vida SUELE (no siempre) tener reconocimiento y llegar a buen puerto. Desde luego, es mi forma de vivir y la que estoy inculcando en mis hijos. El tiempo dirá si me estoy equivocando, pero viendo el ejemplo de mis abuelos, de mis padres y de los mayores que conozco, no lo creo.
      Un saludo
      Julio

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  4. ¿Podrías pasarnos la fuentes que manejas para despachar como fracasados a los que invirtieron en el big short? Gracias

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    1. Hace 30 años las fuentes eran escasas. Ahora basta teclear en Google y sale de todo. Pon el nombre de los protagonistas de la película en el buscador y léete varios artículos sobre los mismos (no basta con leer ese el primero que encuentres). Verás que, en general, no se ha repetido el éxito que tuvieron con los CDS y los bonos hipotecarios.
      Otro saludo
      Julio

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  5. Hola Julio,

    Buena entrada, es curioso estos temas. La hormiguita nunca fue glamurosa y me temo, que nunca lo será. Yo hago un camino muy similar al tuyo, poco a poco y tan seguro como puedo. Lo curioso es que cuanto más seguro ando invirtiendo mejor me salen los números. Es muy bonito acordarse (por ejemplo yo de comprar Gamesa cuando estaba a 2€) y decir que si hubiera invertido hubiera ganado mucho. Pero muchas veces nuestro cerebro hace olvidar todas esas horribles ideas que hemos tenido (y alguna o muchas hubiéramos hecho) y que hubieran sido una pérdida enorme de dinero. De forma que yo estoy mucho más tranquilo.

    El del agua era un elemento de cuidado, quizás no le vaya muy bien, pero lo que ni en la película ni en el libro se ve es el palo moral de que los inversores a los que hiciste ganar dinero, le dieran la espalda, le demandaron y poco menos que le acorralaron, para encima tener razón. El mundo de la inversión en fondos es una mierda, todos hablan del largo plazo, pero la realidad es que la mayoría solo buscan el corto plazo y se ponen nerviosos en dos meses, dicen que entienden lo que haces pero lo único que miran son cuatro números.

    Un saludo y felicidades por la entrada.

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    1. Hola Dividendo. Totalmente de acuerdo. Creo que has descrito la situación con gran realismo en tu segundo párrafo. Se busca lo inmediato, la ganancia rápida, el dinero en mano. Cuando, precisamente, lo que da la ganancia sería, de la buena, es el tiempo, "enterrar" el dinero, saber esperar sin ver un duro hasta pasado mucho tiempo. Pero esto va contracorriente, como bien dices. En fin, se irá viendo. Ya cada uno hace sus cuentas, si no ahora, dentro de unos años.
      Se bienvenido por estos andurriales...
      Un saludo
      Julio

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